Descubrí Belgravia en Valencia por casualidad. La recomendación de un familiar que es amigo de… lo típico. Al principio desconfié, cuando te dicen «Te va a encantar» sabes que te vas a enfrentar a la imagen que otros tienen de ti, y no a tu propio gusto. Pero esta vez, quien me lo recomendó me conocía realmente bien. Porque yo nunca había estado en un local como Belgravia, ni parecido. Diseño, interiorismo, restauración… todo en equilibrio a un nivel excelente. No es fácil.
Desde entonces presumí muchísimo de llevar a gente muy distinta a Belgravia: a amigas a merendar, a mi chico a desayunar, a compañeros de trabajo a comer… ese año, el cava de celebración de mi cumpleaños se tomó en Belgravia con un la facción más ínima de mi familia.
Las fotos hablan por sí solas: el interiorismo acota varios ambientes, desde la terraza de la calle, atravesando el local hasta una preciosa terraza interior acristalada. Todo inundado de luz, el mobiliario blanco, las orquídeas en las mesas… invitan al relax, a la conversación tranquila.
Leí en una entrevista a Laura Gallego, dueña de Belgravia, que introducirse en el mundo de la restauración vino por la necesidad de encontrar en Valencia un afterwork para tomar una copa antes de ir a casa, un remanso donde tomar un café acompañado de una buena novela sin sentirte incómodo… un equivalente de lo que ella iba encontrando en las ciudades europeas donde le llevó su trabajo. De hecho, Belgravia toma su nombre de uno de los barrios más selectos de Londres.
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Hoy he conocido a Laura y me ha contado las actividades que vienen realizando, como «comidas en inglés», «cierra Belgravia para tus amigas», «el brunch de los sábados»… ¡Me ha encantado! Y además ahora sus paredes exponen obras, que es como mudar la piel sin cambiar de cuerpo.
Estoy escribiendo este post desde Belgravia, junto a la terraza interior, sentada en mi sofá blanco, con la orquídea en la mesa, nada ha cambiado desde que «me lo descubrieron»: me han atendido de lujo y nadie me ha incomodado porque llevo aquí más de una hora y media con mi portátil, compaginando trabajo con el placer de recomendaros los sitios bonitos que voy descubriendo…
Belgravia – C/ Sorní 15 – 46004 Valencia
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Es un sitio precioso, con una atención cuidadísima, y los minibocatas son deliciosos. Gracias por descubrírmelo, guapa!
Ummm… ese jamoncito ibérico, ese pan de olivas. Gracias Sally!
Mi mujer y yo descubrimos Belgravia juntos. Nos escapamos una tarde «sin niños» y merendamos de su carrito de sandwiches estilo inglés.
Sin niños, eh? Eso es relax sobre relax! Gracias Vincent por recordarnos ese carrito de meriendas…
[…] a primera hora en el centro de Valencia. Puedes desayunar consultando la prensa en Belgravia (C/ Sorní 15) o acompañarlo de algo más dulce y crujiente como los mini-croissants […]