Bienvenidas a los Treinta

Siempre he admirado a la gente que escribe bien. Que traduce sus sensaciones, sus ideales, sus reivindicaciones… literalmente de la cabeza a la letra. Esa gente que cuando los estoy leyendo levanto las manos, abro los ojos (y la boca, claro) y digo «Eso es JUSTO lo que yo pienso». Tengo una amiga virtual. Contacto con ella de vez en cuando y siempre tiene cosas que contarme. Con ella me río, reflexiono, me río, aprendo, me río y me digo «¡Eso es JUSTO lo que yo pienso!». Llevo años siguiendo el blog Bienvenidas a los Treinta: la chica que lo lleva, Mustang Sally, es mordaz, ingeniosa y directa. Sus textos, absolutamente inteligentes, tratan de temas muy variados: publicidad, cine, sexo, arte, moda… desde la perspectiva de quien ya reflexiona sobre lo vivido.

Lo que más gusta de Bienvenidas a los Treinta

Lo que más me gusta de Bienvenidas a los Terinta es lo que más me gusta de Mustang Sally, mi amiga virtual: que no tiene pelos en la lengua. Y es lo que más agradezco en estos tiempos de lo «políticamente correcto».

Y no nos equivoquemos, aunque ella asegura que le horroriza que su jefe o su pareja puedan llegar a leerlo, yo he visto aquí a un compañero partirse la caja literalmente con su post «Amanecer (que sí es poco)». Es más, a más de uno le vendría al pelo ir leyéndose un post semanal como tratamiento.

Larga vida virtual a Mustang Sally! Te seguiré también cuando saltes a la siguiente década (glubs!)

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